La esfera empresarial se sostiene gracias a las relaciones entre todos los agentes que participan en el mercado. Estos son los proveedores, empresas y clientes que llegan a acuerdos a través de los contratos mercantiles. Dichos contratos mercantiles, por lo tanto, tienen la finalidad de plasmar un acuerdo de voluntades privadas entre agentes independientes, en los que se generan derechos y obligaciones para todas las partes. Pero ¿qué ocurre cuando una de las partes no cumple sus obligaciones? A la hora de firmar un contrato mercantil, es esencial conocer las fórmulas jurídicas que existen para protegerte ante el incumplimiento de las obligaciones de contratos mercantiles por parte del otro agente.

¿Qué es el incumplimiento del contrato mercantil?

Se puede considerar que el incumplimiento de un contrato es el mayor riesgo al que se enfrentan las partes interesadas al firmar un el contrato mercantil. Esta situación se produce cuando uno de los sujetos no cumple con las obligaciones acordadas. La clave de las relaciones empresariales es establecer contratos que reúnan los requisitos legalmente exigidos, para que el deudor asuma lo pactado.

Medidas de prevención de impagos ante la firma de un contrato.

  • En primer lugar, es esencial acudir a profesionales jurídicos para estudiar correctamente todas las cláusulas que componen nuestro contrato antes de firmarlo.
  • Es imprescindible obtener los datos exactos de las partes acordantes, sean personas físicas o jurídicas. Es esencial la obtención de los datos en el Registro Mercantil de dicha empresa y ser conocedores de su situación de solvencia.
  • En nuestro contrato, es importante establecer cláusulas por escrito que nos protejan ante este riesgo como establecer penalizaciones para la parte incumplidora. Este es el punto clave en el que se debe especificar que el deudor, no solo deberá hacer frente al pago acordado, sino que además también deberá abonar una indemnización por retraso del pago.

Formas de exigir el cumplimiento de un contrato:

Llegados al punto de tener la necesidad de exigir a la parte deudora el cumplimiento del contrato existen varias vías para hacerlo.

  • Exigir de forma extrajudicial el cumplimiento del contrato: antes de llegar a la vía judicial se establece una reclamación amistosa. Normalmente, suele ser a través de un documento escrito: el burofax. Este documento sirve, posteriormente, como prueba en un juicio. Este trámite tiene como objetivo enviar a la parte deudora un documento que prueba el impago de forma indudable exigiendo el cumplimiento de este.
  • Antes de llegar a interponer una demanda, existe otra opción para la búsqueda de la resolución del conflicto que es a través de un mediador. Su objetivo es buscar un nuevo acuerdo entre las partes.
  • Exigir de forma judicial el cumplimiento del contrato: una vez llegados a este punto, se solicita la interposición de una demanda contra la parte deudora. En este caso se necesita evaluar qué tipo de incumplimiento se ha producido.

Procedimientos para la reclamación de un contrato de forma judicial:

  • Procedimiento verbal: se aplican cuando las deudas son menores a 6.000€ y mayores a 2000€. Se celebra un juicio tras interrogatorios y presentación de pruebas de ambas partes.
  • Procedimiento ordinario: se aplican cuando la cantidad es superior a 6.000€. Se celebra el juicio posteriormente a la Audiencia Previa donde las partes presentan sus pruebas.

En Martinez-Sanz Abogados, le mostramos cuáles son las mejores opciones en cada momento y trabajamos para poder emprender las acciones legales en defensa de sus intereses.  Le recordamos que, debido a las medidas de seguridad adoptadas, estamos teletrabajando. Pero seguimos a su disposición para sus consultas mediante correo electrónico (info@martinezsanzabogados.com) y teléfono (+ 34 964 83 16 60 / + 34 911 92 20 12).

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